La vida no es como uno quiere, se la ha de aceptar tal como viene porque sólo tenemos una. Eso no significa que no debamos luchar por cambiar o mejorar nuestro destino prefijado desde que nacemos. Nosotros mismos nos marcamos los objetivos de nuestra vida y decidimos lo que vamos a hacer en cualquier momento porque tenemos libertad de elección y de pensamiento. Así que disfrutemos la vida mientras podamos porque no sabemos en que momento dejaremos de existir, la vida es demasiado corta y no la aprovechamos como deberíamos.
Manuel Morillo